lunes, 25 de julio de 2011

Siria aprueba la nueva ley de partidos



El Consejo de Ministros de Siria aprobó, en una sesión presidida por el Primer Ministro Adel Safar, el proyecto de la nueva ley los partidos políticos como parte de las directivas del programa de reforma política y los esfuerzos para enriquecer y revitalizar la vida política. El proyecto de ley incluye los objetivos y principios básicos de regulación de los partidos, las condiciones y procedimientos para el establecimiento de licencias y legislaciones relativas a los recursos, la financiación, los derechos y los deberes.

Los requisitos para el establecimiento de un partido son los siguientes:

1. El cumplimiento de la Constitución y los principios de la democracia y la autoridad de la ley, además del respeto a las libertades, a los derechos fundamentales, a las declaraciones internacionales de derechos humanos y a los convenios internacionales ratificados por la República Árabe de Siria.
2. La preservación de la unidad de la patria y la consolidación de la Unidad Nacional de la sociedad siria.
3. Es esencial, que sean públicos los principios del partido, sus objetivos, métodos y fuentes financieras.
4. Es fundamental que la base del partido no sea religiosa, tribal, regional o de clase, o sea basada en raza, sexo, color.
5. Que la formación del partido y la elección de su dirección y el inicio de sus actividades tenga como base fundamental la democracia.
6. Que los procedimientos de los partidos políticos a formarse, no se estipule el establecimiento de organizaciones militares o paramilitares públicas o clandestinas.
Ni se haga uso de la violencia en cualquiera de sus formas ni tampoco se utilice la amenaza y/o la instigación al desorden.
7. Que el partido no pertenezca ni sea una rama o subordinado de otro partido u organización política que se encuentre fuera del territorio nacional sirio.

El Ministro de Justicia, Taysir Qala Awwad, dijo que el proyecto completo está compuesto de 40 artículos, incluidos los objetivos de las partes, los principios, las condiciones de establecimiento, los recursos, y la legislación financiera, generales y de cierre.

Sobre la solicitud de establecimiento de un partido, el ministro dijo que la aplicación debe ser remitida a la comisión con la firma de 50 de sus miembros; los miembros deben ser de nacionalidad siria -por más de 10 años-, mayores de 25 años de edad, no haber sido condenados de un delito o un crimen y no ser miembro de otro partido sirio o extranjero. El número mínimo de los miembros del partido debe ser de 1.000, y que deberían pertenecer al menos a la mitad de la gobernación de Siria con cada provincia representada por al menos el 5% del número total de miembros. Awwad señaló que el comité decidirá -dentro de los 60 días a partir de que reciba la solicitud- aceptar o rechazar la solicitud y el rechazo se acompañará de una explicación.

Esta medida se suma a una serie de reformas que el régimen sirio ha operado desde que se iniciaron las manifestaciones en marzo; el levantamiento de las leyes de emergencia, la concesión de la nacionalidad siria a miles de kurdos y varios indultos a presos políticos se encuentran entre las más notorias. Sin embargo estas concesiones no han frenado el impulso de las el impulso del movimiento de protesta, lo que les ha despedido, ya sea simbólica o muy tarde.

El gobierno, sin embargo, no ha dado señales de finalizar en sus esfuerzos para aplastar el levantamiento. El domingo, las tropas sirias atacaron un pueblo del noroeste y el hecho detenciones colectivas en la región y en Damasco, las fuerzas de seguridad detuvo a cientos de civiles e hizo arrestos cerca de Homs y en la ciudad de Sarakeb en la provincia del noroeste de Idlib cerca de la frontera con Turquía.

La nueva legislacion ha sido recibida con escepticismo por los activistas, quienes señalan que el dominio constitucional del gobernante partido Baath y la represión hacia los grupos de derechos humanos continúan. Se han recibido informes que el presidente Al-Assad derogará el artículo 8 de la Constitución del país -que establece el papel dirigente del partido Ba´ath- sin embargo, el artículo sigue vigente, a pesar de Al-Assad dijo en su discurso del 20 de junio pasado que son posibles las modificaciones a la Constitución.

Resulta difícil considerar que este proyecto suponga una transformación radical del sistema político cuando desde el gobierno no se envían las señales correctas. Solo por citar algunos ejemplos de ello, solamente se conocen siete puntos de cuarenta de un proyecto de ley que no fue consensuado por los representantes de las diferentes fuerzas sino que surgió de una decisión de gabinete del mismo partido-régimen que está siendo cuestionado hoy en las calles; por otro lado los requisitos conocidos en los siete puntos no reflejan un ánimo democrático si tenemos en cuenta que no se podrán asociar partidarios en base a su religión o pertenencia étnica, se necesitará de la aprobación de un comité y se le niega la posibilidad de establecer una agrupación a personas con causas legales cuando la mayoría de las figuras de la oposición han enfrentado –o enfrentan en la actualidad- juicios y sentencias en base a la ley de estado de emergencia.

El momento en que la medida es anunciada también podría reflejar la preocupación oficial sobre el próximo mes de Ramadan, previsto para principios de agosto, cuando los manifestantes esperan darle un nuevo impulso a su movimiento; las oraciones de la tarde al final

Al comienzo de las manifestaciones la comunidad internacional se preguntaba si el presidente Al-Assad era un modernizador o un reformista, al cabo de seis meses se observan más concesiones que reformas. Pero la capacidad para sostener este modelo de status quo puede estar debilitándose, o al menos dando señales de fatiga.

La base económica está debilitándose, ya que han caído los ingresos por turismo -13 % del PBI en 2010- y se habla de una fuga de capitales por unos u$S 20 mil millones hacia Estambul. Rami Makhlouf, el multimillonario primo del presidente Al-Assad, cuyos intereses representan más de un tercio de la economía siria, se encuentra bajo presión. Una asamblea de accionistas de Cham Holding, no fue capaz de elegir una nueva junta directiva este mes después de que el presidente saliente, Nabil Al-Kuzbari, fue colocado en la lista negra del Control de Activos Extranjeros de la Oficina del Tesoro de los EE.UU.

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