lunes, 9 de junio de 2014

La solución libanesa para Siria


El Primer Ministro de Qatar, jeque Abdullah bin Naser bin Kahlifa Al-Thani, en su intervención en la 11º edición del Foro Mundial Islámico en Doha, instó al Consejo de Seguridad a que imponga un alto el fuego en Siria e intervenga para ponerle fin al conflicto que “amenaza la estabilidad regional”. Según el mandatario qatarí, "Es responsabilidad de la comunidad internacional, en especial el Consejo de Seguridad, actuar con urgencia y decisión para adoptar una resolución para imponer un alto el fuego para garantizar la seguridad y la seguridad del pueblo sirio, así como la estabilidad en toda la región." 

El Gral. Brig. Abdelilah Al-Bashir, quien desertó en 2012 y lideró las fuerzas rebeldes del Ejército Libre de Siria (ELS) en el Golán antes de convertirse en jefe de gabinete de Consejo Militar Supremo de ELS (CMS) en febrero, dijo que Washington estaba pasando por alto al CMS para el envío de armas y las suministraba directamente a los grupos, algo que dificultaba el control. Al-Bashir sostiene que los suministros de armas estadounidenses a los rebeldes sirios pueden crear caudillos regionales al estilo somalí y están socavando el mando militar de los rebeldes; Bashir, cuya organización ha sido calificada por muchos rebeldes como ineficaz, dijo que Washington los había dejado de lado después que un depósito de armas del CMS fue capturado por los yihadistas en diciembre y eso llevó a la destitución de su antecesor, el Gral. Al-Salim.

A principios de conflicto de Siria, el Departamento de Estado de EE.UU. -incluyendo a la entonces Secretaria de Estado, Hillary Clinton- presionó mucho para que EE.UU. proporcionase un fuerte apoyo para la oposición moderada; la recomendación no fue seguida y aunque Ford señaló que el “Departamento de Estado pensó que necesitábamos para dar mucha más ayuda a la oposición armada en Siria (…) EE.UU. y nuestros amigos, tenemos herramientas que podrían haber puesto una mayor presión sobre Bashar Al-Assad (…) Sobre todo porque la amenaza extremista a EE.UU. y a nuestros amigos que emanan de Siria crece, creo que realmente hay que considerar cuidadosamente si estamos haciendo todo lo que podamos para ayudar a nuestros amigos en Siria (…) Al-Assad no estaría en la posición de poder que está ahora si no fuese por el apoyo de actores extranjeros como Hezbollah, Irán y Rusia”.

El ex enviado de ONU, Lakhdar Brahimi dijo que el conflicto "amenaza con explotar " y que se extendió más allá de las fronteras de Siria. Advirtió que Siria "Va a ser convertida en otra Somalia (…) No va a ser dividida, como ya muchos han pronosticado. Va a ser un Estado fallido, con señores de la guerra por todo el lugar”; además Brahimi criticó a Irán y Rusia para apoyar al gobierno sirio, y dijo que el presidente Bashar Al-Assad está "100% consciente de la forma en que se está llevando a cabo la guerra (…) Él sabe mucho del infierno. Tal vez él no lo sabe cada detalle de lo que sucede, pero estoy seguro de que él es consciente que las personas están siendo torturadas, que la gente se está matando, que las bombas se están lanzando, que ciudades están siendo destruidas."

Irán había temido la posibilidad que el régimen sirio algún día podría colapsar, pero un resultado "victorioso" del presidente Al-Assad hace menos probable este escenario. Teherán se centra ahora en las soluciones que podrían llevar a Occidente a la aceptación de este nuevo periodo presidencial y que pérdidas podría producirse en el campo de batalla sirio si la situación no es controlada. Irán cree todas partes deben finalizar en la búsqueda de una solución política y sugiere reformas desde abajo: alto el fuego locales para dar paso a un nuevo asentamiento, que mantendría la "Media luna chiita", una alianza estratégica que se ejecuta a través de Damasco, Beirut, Bagdad y Teherán.

La diplomacia iraní ya actuó en el pasado sobre Siria y sobre Líbano. Después de la guerra civil libanesa, de 15 años que terminó en 1990, Irán quiere seducir a Arabia Saudita y a Occidente con una gran oferta en Siria: esto implicaría una comprensión iranio-saudí sobre Siria, similar a la alcanzada por el fallecido presidente sirio Hafez Al-Assad y Arabia Saudita sobre el Líbano en los 90; Al-Assad se mantendría como presidente, pero tendría que gobernar con un Primer Ministro fuerte suní -presumiblemente procedente de la oposición interna- que obstaculice al poderes ejecutivos, en poder de la propia presidencia desde 1970, mientras que el presidente del Parlamento sería un kurdo. Cristianos y drusos también estarían representados.

El dato del día: el presidente Al-Assad declaró una amnistía general para los presos en el país, informaron medios estatales. No estaba claro cuántos prisioneros serían liberados después del decreto presidencial, emitido tan sólo 5 días después de su triunfo electoral, y la agencia oficial SANA no precisó si la amnistía se aplicaría a las decenas de miles de partidarios de la oposición. El informe de SANA sugirió que se reducirían las condenas de los presos, pero sin liberarlos.

Tal como dijo Brahimi, Arabia Saudita e Irán como las principales potencias patrocinantes de cada de división sunita-chiita, tienen "que comenzar a discutir como no cómo ayudar a las partes en conflicto, y sobre la forma en que van a ayudar al pueblo sirio y a sus vecinos"; la posibilidad de una guerra civil prolongada en el tiempo es un error tal como se pudo apreciar con la situación en Líbano. La conjunción de intereses político-religiosos de ambos actores los hace imprescindibles para la solución de la guerra civil siria, situación que se ve potenciada por la reticencia o impericia de las potencias occidentales para arribar a un acuerdo que respete las posiciones de ambas partes.


1 comentario:

sergio elizondo dijo...

¿Es viable el modelo libanes para Siria?.
Lastimosamente la respuesta es un NO rotundo por las siguientes razones:
1. El modelo libanes se basa en el reparto del poder conforme a las confesiones del pais. Asi un presidente es sunni, el primer ministro cristiano y los demas estamentos del poder se lo reparten según las confesiones. Pero es un modelo muy endeble, fragil y carente de autoridad. Los politicos libaneses carecen de un verdadero sentido comun y para ejemplo de ello es Saad Hariri y sus acolitos del 14 de marzo, los cuales están interesados en una guerra sectaria en el Libano. De no ser por Hezbollah, el Libano sería un escenario de guerra civil sin fin. Bastaria un pequeña crisis para que el modelo politico vuele en mil pedazos.
2. No hay verdaderos lideres politicos sunnies en Siria capaces de asumir el poder por ahora. Bashard -aunque a algunos les duela- y los alawies son la garantia para la estabilidad de Siria. Los integrantes del decrepito CNS son desechables y no sirven.
3. Se está enfrentando a una "revolucion" takfirie que es sanguinaria, cruenta y será -desgraciadamente- larga por lo que hablar de un modelo como el libanes equivale a un suicidio para Siria. ¿Por que? Porque en esta situacion no es viable los choques por razones sectarias o ideologicas. Se requiere una mano firme para afrontar la situacion. NO es tiempo de probar modelitos extranjeros y exogenos por cuanto la situacion no lo permite.
4. La mas importante: Las elecciones del 03 de junio del año en curso. El pueblo sirio voto mayoritariamente por Bashard Al Assad y con una altisima participacion del pueblo. Se dice que la voz del pueblo es la voz de Dios, asi que es viable pensar que los sirios quieren su modelo politico actual y no piensan cambiar a mediano o largo plazo.
En sintesis una cosa es lo que los think tank o los intelectuales en sus oficinas piensen y otra muy distinta es la realidad. Los que preconizan el modelo libanes, creo que seria bueno que visitaran Siria y vieran en el terreno la realidad.