El Comando General del Ejército y de las Fuerzas Armadas sirias informó dijo que grupos terroristas armados atacaron varios puestos militares el viernes, hasta las 12.30 hs., de acuerdo al comunicado, el Comando General considera a los ataques como una clara violación del anuncio de la suspensión de las operaciones militares a las que el Comando adhirió el 25 de octubre. La declaración consigna que los grupos armados abrieron fuego contra puestos militares en Deir Ezzor, incluidos los puestos de control en Halabyeh a las 7.25 am y en al-Jabelah a las 7.30 horas y en un puesto de control policial a las 7.35 horas; otro grupo abrió fuego contra un puesto de control en frente del Centro Cultural en Daraa a las 7.15 am; a las 7.00 am atacaron posiciones militares en las áreas de Harem, Silkeen, Wadi al-Daif y Al-Allanah en Idelb; en Homs, grupos armados atacaron un puesto de control militar de Bab Hood -a las 11.00 am- y puestos de control Talkalakh a 9.00 am.
Durante la tarde se recibieron varios informes de violaciones al cese al fuego y el gobierno sirio -que reconoce el alto el fuego-, que se reservó el derecho de responder a los ataques de los grupos rebeldes, dijo que había respondido a violaciones de la tregua por parte de los rebeldes. Los diferentes grupos insurgentes, por su parte, han dado señales mixtas sobre el acatamiento: algunos grupos en el terreno expresaron su apoyo a la tregua en medio de un escepticismo generalizado sobre el régimen –especialmente dentro del Ejercito Libre Sirio (ELS)- mientras que otros sectores –como los yihadistas del Frente Al-Nusra- habían rechazado de plano la iniciativa de Lakhdar Brahimi.
Un poderoso coche bomba explotó cerca de un parque infantil improvisado, que fue construido para la festividad de Eid al-Adha, en el distrito sur de Daf Al-Shok de Damasco. La violencia fue menos intensa que lo habitual y los activistas no reportaron ataques aéreos, pero unas 70 personas fueron asesinadas, entre ellos 26 soldados, según informó el Observatorio Sirio para los DDHH, que supervisa el derramamiento de sangre en el país; al atardecer del primer día del cese al fuego, la cifra de muertos sigue siendo significativamente menor que en los últimos días, cuando a menudo entre 150 y 200 personas han sido asesinadas.
Otro dato del día fue una fuerte tormenta de unos 30 minutos que se registró en Aleppo y que expone los límites del control de los rebeldes del ELS que armados con fusiles sólo podían dirigir el tráfico y reconocer que no había desvío seguro y no hay otra solución más que esperar a que el agua se evapore de las principales calles de la ciudad. El anegamiento de varias zonas de la ciudad imposibilitó que se pensara en combates y el principal problema pasó a ser como se transitaría por la ciudad de Aleppo.
El respeto por el alto el fuego fue desigual, en parte porque no todos los grupos rebeldes aceptaron de igual manera la tregua y además no se establecieron sistemas de monitoreo, siendo un cese al fuego “ad hoc” que no contempla un inicio y final formal. El cese al fuego propició la reaparición de las protestas, que por mucho tiempo fueron reprimidas por el régimen sirio, que salieron de nuevo a las calles pidiendo el derrocamiento de Al-Assad -en algunos lugares hasta su ejecución- y un gran número de personas se congregaron en Hajar al-Aswad -un suburbio del sur de Damasco- en los alrededores de Aleppo, en Deir az-Zour y Dara'a.
El enviado Lakhdar Brahimi ha viajado por la región durante las últimas dos semanas para promover su iniciativa y el miércoles ganó el apoyo del Consejo de Seguridad de la ONU, aún de Rusia y China. Aunque la mayoría de los grupos de la oposición aseguraron que apoyarían la tregua, algunos rebeldes expresaron su escepticismo acerca de las posibilidades de que funcione, en especial por el pasado de violaciones a treguas previas por parte del régimen sirio.
El primer día de tregua no ha sido respetado de manera total, pero ha dejado la impresión que ambos bandos tienen un cierto agotamiento y necesitan un respiro, en especial luego de las últimas semanas de duros combates en el norte del país. El cese al fuego no significa que la solución política al conflicto esté próxima, pero los enfrentamientos no pueden sostenerse de manera indefinida por lo que si la iniciativa prospera en los tres próximos días sentaría las bases para un acercamiento entre las partes.
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