El presidente sirio, Bashar Al-Assad, dijo durante una entrevista concedidaa la cadena iraní Press Tv que "Todaslas posibilidades han sido juzgadas y sólo hay una opción por delante, que esla defensa de nosotros mismos y de nuestro país, con nuestras propias manos, o
en este caso, con las Fuerzas Armadas". El presidente sostuvo que el resultado
final se "decidirá en el terreno" y precisó que es posible un
"curso político paralelo" pero que el gobierno no ve a ninguna
negociación como una "justificación para detener la lucha contra el
terrorismo."
Al-Assad dijo que el aplastamiento "terroristas" debe llegarantes que cualquier solución política a la crisis en Siria. Hablando en
Damasco, Al-Assad elogió los recientes logros de sus fuerzas militares en todo
el país y dijo que Siria puede acabar con la insurgencia "en unos meses si
la gente lucha con el ejército en una guerra popular"; Al-Assad señaló en
otro pasaje de su discurso que "El terrorismo y la política son
completamente opuestos. No puede haber acción política y el progreso en la vía
política, mientras que el terrorismo golpea en todas partes. Ninguna solución
se puede llegar con el terror sino que golpear con un puño de hierro”. El mensaje
del presidente fue durante la cena de "iftar" del domingo, donde
asistieron personalidades sirias destacadas -clérigos, hombres de negocios y de
las artes- además se vio a la primera dama, Asma Al-Assad.
Rebeldes sirios lanzaron una nueva ofensiva contra las fuerzasleales al presidente Al-Assad en la zona de Qurdaha -provincia de Latakia- y que
alberga a la ciudad natal de la familia Al-Assad en pleno “corazón alawita”. La
escala de la ofensiva, la más grande en el centro histórico de la familia Al-Assad,
parece un golpe a la reciente confianza mostrada por el presidente Bashar
Al-Assad quien daba por sentado la derrota de los rebeldes; unos 1000 efectivos
de grupos afiliados a Al-Qaeda tomaron
parte de la iniciativa -muchos de ellos extranjeros, tunecinos, libios, saudíes-
y utilizaron una combinación de tanques con artillería para avanzar sobre las
aldeas alawitas.
En el frente económico también continúan las batallas por parte del
gobierno sirio. El presidente Al-Assad prohibió ayer el uso de divisasextranjeras en las transacciones comerciales, como parte de los esfuerzos del
gobierno para apuntalar la libra siria, que ha caído a 200 libras por dólar -de
47 libras en marzo de 2011- y la agencia de noticias del gobierno (SANA)
precisó que las personas que ofrezcan productos y servicios en divisas
extranjeras sin la aprobación del gobierno podrían ser multados y condenados a
un mínimo de 6 meses de cárcel y si el caso supera los u$s 5.000, el castigo
podría ser de hasta 10 años de trabajos forzados.
Los banqueros sirios sostienen que la decisión reforzó lasprohibiciones existentes sobre los bienes de los precios en dólares -una ley
que ha sido cada vez burlado después de fuertes fluctuaciones de la libra siria-
y que las sanciones se han endurecido. Si bien la medida apunta a evitar que
las personas huyan al dólar, lo ciertos es que la devastación de las ciudades
comerciales e industriales –como Alepo y Homs- junto con la pérdida de los
ingresos de las exportaciones de petróleo y el turismo secaron el mercado de
divisas y a la economía. Los daños se estiman en decenas de miles de millones
de dólares y se espera que la cosecha de trigo de este año caiga a la mitad.
Con respecto a la principal coalición de oposición nacional,Al-Assad se refirió a ésta como un "fracaso", y agregó que no puedetener ningún papel en acabar con la guerra en el país; según el presidente
sirio "Esta oposición no es confiable, es un fracaso a nivel popular y
moral, y no tiene ningún papel en la solución de la crisis, ya que sólo busca
obtener ganancias"; además Al-Assad acusó a los miembros de la Coalición
de "estar en la nómina de más de un país del Golfo” y de "culpar al
Estado sirio de terrorismo en lugar de culpar a los hombres armados o rebeldes”.
Lo cierto del conflicto sirio es que luego de más de 2 años deguerra civil, el Estado una vez altamente centralizado y autoritario ahora seha dividido efectivamente en tres partes bien diferenciadas, cada una con sus
propias banderas, los organismos de seguridad y el sistema judicial. Este punto de vista ha sido reforzado
recientemente con los avances del régimen en y alrededor de capital, Damasco, y
en la provincia de Homs, uno de los ejes estratégicos que une Damasco con los
bastiones del régimen de la costa mediterránea: Homs es un cruce de caminos, y
si el régimen quería asegurarse el control sobre la ciudad, ahora se puso en
una posición más fuerte para atacar a los rebeldes que tienen en su poder al
eje que atraviesa el centro del país.
Los misiles balísticos lanzados por el ejército sirio estánafectando las zonas pobladas, causando un gran número de muertes de civiles,entre ellos muchos niños. En los más recientes ataques que Human Rights Watch
investigó, en la gobernación de Aleppo del 26 de julio de 2013, murieron al
menos 33 civiles de los cuales 17 eran niños. Varios videos en YouTube, con el
texto que los acompañan, indican que fueron filmados entre diciembre 2012 y
julio 2013 por las fuerzas militares sirias lanzando misiles balísticos, que
Human Rights Watch identificado: misiles de tipo Scud, misiles SS-21 Tochka y
Luna-M.
La toma de posesión del nuevo presidente de Irán, Hassan Rouhani se
acompañó de un aumento de las expectativas. Después de ocho años de provocación
de Mahmoud Ahmadinejad, Rouhani tiene una ventaja. En Rusia, la asunciónestuvo acompañada por los rumores sobre que el presidente Vladimir Putinvisitaría Irán, una semana después de la asunción; pero los rumores fueronnegados oficialmente y la primera reunión será en septiembre, durante la Cumbrede la Organización de Cooperación de Shanghai, en Kirguistán.
El callejón sin salida que es el conflicto sirio demanda de nuevas instancias
entre las partes involucradas, pero si Rusia no cambió su postura cuando el
mundo esperaba el colapso del régimen de Al-Assad, ¿Por qué lo haría ahora? El
otro actor con intereses en Siria es Arabia Saudita y es uno de los pocos que
es capaz de ejercer una verdadera presión sobre la oposición siria. En la
situación actual, después del cambio de poder en Qatar, Riad ha asumido más
responsabilidad, más aún cuando Washington retrasa su participación. El Príncipe
Bandar debe darse cuenta de la magnitud de la comprensión potencial con Moscú
sobre los problemas regionales más importantes, sobre todo los problemas de
Siria e Irán.
La solución para la guerra civil siria debe
llegar desde adentro del país, pero mientras Al-Assad tenga poder –militar,
económico, social, etc.- difícilmente se sentaría a negociar con la oposición;
el poder del régimen sirio es derivado del apoyo que recibe de Rusia e Irán,
por lo que radica en estos Estados la clave para una solución al conflicto.
Adicionalmente, Arabia Saudita tiene el incentivo de evitarse una nueva derrota
en la región, ya como está planteado el tablero sirio, mientras Al-Assad tenga el
apoyo ruso-iraní, no le será complicado mantener a raya a los grupos rebeldes
apoyados por Riad.
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