La Liga Árabe renovó su llamado para poner fin a la violencia en Siria durante la reunión del domingo, de acuerdo con un proyecto de declaración en el debate por la Liga; el proyecto de la Liga también culpó al gobierno de Siria y a grupos militares por no adherirse a un plan de paz y pidió al movimiento de oposición sirio a cooperar con el esfuerzo de monitoreo. La llegada el mes pasado de los monitores de árabe a Siria, para evaluar si el gobierno estaba cumpliendo con la promesa de poner fin a la represión, no sido bien recibido por todos los sectores que lanzan acusaciones cruzadas.
La oposición siria percibe que los monitores Liga Árabe sólo le han dando a las autoridades sirias tiempo para tomar medidas más enérgicas contra los manifestantes y personalidades de la oposición, luego de conocida la decisión de la Liga de mantener la misión en el terreno a pesar del fracaso de Siria para cumplir plenamente con el plan de paz acordado en diciembre. Los observadores, cuya misión comenzó hace dos semanas, hasta el momento han fracasado en detener la violenta contra las protestas que piden la dimisión del presidente Bashar Al-Assad.
Después de una reunión en El Cairo para revisar el progreso, la Liga Árabe dijo que el gobierno sirio había aplicado sólo en parte un compromiso para detener la represión, liberar a los detenidos y retirar las tropas de las ciudades. Rima Fleihan, miembro del Consejo Nacional de Siria, señaló que el informe inicial es demasiado vago, y que, esencialmente, el régimen de compra más tiempo; Fleihan cuestionó la falta de un plan de la Liga en el caso que el régimen continuase con la represión en la presencia de los monitores.
Ahmad al-Khatib, miembro de la Comisión General de la Revolución Siria, dijo que el informe de la Liga Árabe "podría haber sido más contundente" pero que al menos reconoce la necesidad de más monitores para observar los disturbios y la represión a través de una nación de 23 millones de habitantes.
La Hermandad Musulmana siria acusó a la Liga Árabe de tratar de "encubrir los crímenes" del régimen sirio, el portavoz de la Hermandad Zuhair Salem dijo además que la misión de la Liga Árabe había fracasado en demostrar la responsabilidad del régimen de la muerte de miles de sirios, entre ellos cientos de niños al equiparar al aparato de seguridad estatal con los actos individuales de auto-defensa de la oposición.
Funcionarios de la Liga Árabe dijeron que luego de la continuación de la misión, se conocerá un informe completo donde se evaluará el compromiso del gobierno sirio a cesar con la violencia y honrar sus promesas; los ministros de Relaciones Exteriores de la Liga discutirán los resultados del 19 al 20 enero. El primer ministro de Qatar, Sheikh Hamad bin Jassim al-Thani, adelantó que si el informe indica que la violencia no ha cesado, la Liga Árabe tendrá la responsabilidad de actuar en esa línea, si bien no dijo lo que la Liga Árabe podría hacer.
Qatar, que preside el grupo de trabajo para Siria, y ha sido crítico del desempeño de la misión, había propuesto invitar a los técnicos de la ONU y expertos en DDHH para ayudar a los monitores árabes a evaluar si Siria estaba cumpliendo sus promesas, pero el jeque Hamad dijo que todavía no se había acordado enviar esas personas y todo dependía de cómo se desarrollan los acontecimientos
Las denuncias de la oposición tienen su correlato en la realidad ya que fuerzas de seguridad sirias dispararon contra los manifestantes en Homs, mientras observadores de la Liga Árabe visitaba la ciudad –que ha tenido el mayor número de bajas desde el inicio de las manifestaciones- y se informó que su vehículo fue blanco de los disparos. El malestar de la oposición siria para con la conducción de las misiones de observación, tiene también su explicación en que el régimen sirio apuesta a llegar a marzo, donde Iraq asumirá la presidencia del organismo; el gobierno iraquí ha mantenido estrechos lazos con Al-Assad.
Por otra parte, las autoridades sirias recibieron con beneplácito la visita de una fuerza naval rusa en el puerto de Tartus algo que fue considerado como una "muestra de solidaridad con el pueblo sirio". Un Grupo de Batalla ruso, liderado por el portaaviones Almirante Kuznetsov, llegó a Tartus el domingo para reponer los suministros de agua y alimentos durante una misión de entrenamiento a largo plazo en el Atlántico y el Mediterráneo, se espera que el Grupo salga del puerto el 9 de enero para continuar con la misión de entrenamiento.
La oposición siria percibe que los monitores Liga Árabe sólo le han dando a las autoridades sirias tiempo para tomar medidas más enérgicas contra los manifestantes y personalidades de la oposición, luego de conocida la decisión de la Liga de mantener la misión en el terreno a pesar del fracaso de Siria para cumplir plenamente con el plan de paz acordado en diciembre. Los observadores, cuya misión comenzó hace dos semanas, hasta el momento han fracasado en detener la violenta contra las protestas que piden la dimisión del presidente Bashar Al-Assad.
Después de una reunión en El Cairo para revisar el progreso, la Liga Árabe dijo que el gobierno sirio había aplicado sólo en parte un compromiso para detener la represión, liberar a los detenidos y retirar las tropas de las ciudades. Rima Fleihan, miembro del Consejo Nacional de Siria, señaló que el informe inicial es demasiado vago, y que, esencialmente, el régimen de compra más tiempo; Fleihan cuestionó la falta de un plan de la Liga en el caso que el régimen continuase con la represión en la presencia de los monitores.
Ahmad al-Khatib, miembro de la Comisión General de la Revolución Siria, dijo que el informe de la Liga Árabe "podría haber sido más contundente" pero que al menos reconoce la necesidad de más monitores para observar los disturbios y la represión a través de una nación de 23 millones de habitantes.
La Hermandad Musulmana siria acusó a la Liga Árabe de tratar de "encubrir los crímenes" del régimen sirio, el portavoz de la Hermandad Zuhair Salem dijo además que la misión de la Liga Árabe había fracasado en demostrar la responsabilidad del régimen de la muerte de miles de sirios, entre ellos cientos de niños al equiparar al aparato de seguridad estatal con los actos individuales de auto-defensa de la oposición.
Funcionarios de la Liga Árabe dijeron que luego de la continuación de la misión, se conocerá un informe completo donde se evaluará el compromiso del gobierno sirio a cesar con la violencia y honrar sus promesas; los ministros de Relaciones Exteriores de la Liga discutirán los resultados del 19 al 20 enero. El primer ministro de Qatar, Sheikh Hamad bin Jassim al-Thani, adelantó que si el informe indica que la violencia no ha cesado, la Liga Árabe tendrá la responsabilidad de actuar en esa línea, si bien no dijo lo que la Liga Árabe podría hacer.
Qatar, que preside el grupo de trabajo para Siria, y ha sido crítico del desempeño de la misión, había propuesto invitar a los técnicos de la ONU y expertos en DDHH para ayudar a los monitores árabes a evaluar si Siria estaba cumpliendo sus promesas, pero el jeque Hamad dijo que todavía no se había acordado enviar esas personas y todo dependía de cómo se desarrollan los acontecimientos
Las denuncias de la oposición tienen su correlato en la realidad ya que fuerzas de seguridad sirias dispararon contra los manifestantes en Homs, mientras observadores de la Liga Árabe visitaba la ciudad –que ha tenido el mayor número de bajas desde el inicio de las manifestaciones- y se informó que su vehículo fue blanco de los disparos. El malestar de la oposición siria para con la conducción de las misiones de observación, tiene también su explicación en que el régimen sirio apuesta a llegar a marzo, donde Iraq asumirá la presidencia del organismo; el gobierno iraquí ha mantenido estrechos lazos con Al-Assad.
Por otra parte, las autoridades sirias recibieron con beneplácito la visita de una fuerza naval rusa en el puerto de Tartus algo que fue considerado como una "muestra de solidaridad con el pueblo sirio". Un Grupo de Batalla ruso, liderado por el portaaviones Almirante Kuznetsov, llegó a Tartus el domingo para reponer los suministros de agua y alimentos durante una misión de entrenamiento a largo plazo en el Atlántico y el Mediterráneo, se espera que el Grupo salga del puerto el 9 de enero para continuar con la misión de entrenamiento.
Rusia mantiene una base de mantenimiento naval desde la era soviética cerca de Tartus, como su punto de apoyo militar sólo en el Mediterráneo y es su única estación naval en la región; Moscú había anunciado su intención de modernizar las instalaciones para dar cabida a grandes buques, incluidos los cruceros misilísticos y portaaviones después de 2012.
La Armada rusa participará en varios ejercicios internacionales, incluidos los que participan EE.UU., Gran Bretaña y Francia, según un portavoz del Ministerio de Defensa ruso; buque de guerra rusos participará en el 2012 en los ejercicios Frukus y Baltops 2012 en el Mar Báltico, los ejercicios IONEX 2012 en el mar Jónico, así como en ejercicios conjuntos Monarca 2012, Pomor 2012 y el Eagle Rimpac 2012.
Siria es un eslabón fundamental para Rusia y ello explicaría el creciente interés de Moscú por hallarle una solución a la situación del régimen de Bashar Al-Assad y evitar su sustitución por una figura cercana a occidente.
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